A través de un comunicado, la enfermera y presidenta de la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE), Andrea Ramírez, manifestó que el cierre del único servicio de recuperación cardiovascular “deja sin atención en salud pública a decenas de pacientes sin prepaga”, y agregó que el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires “ajusta en salud, con salarios de miseria, en especial a la enfermería”.
“A la marginación de nuestro colectivo excluido de la Ley N° 6035 y los despidos de centenares de contratados y formados en pandemia, ahora se suma el desmantelamiento de servicios únicos de alta complejidad. Es aberrante”, denunció Ramírez.
Otro de los enfermeros del Hospital Durand, Mario Acosta, señaló que “se cierra el único servicio de recuperación de pacientes que sufren patologías cardíacas severas, pacientes que necesitan by pass coronario, cambios de válvulas aorticas, mitrales y tricuspídeas como así también la colocación de marcapasos y otros cuidados de altísima complejidad”.
En el comunicado se insiste en que este servicio de salud público es único en la ciudad de Buenos Aires y “un derecho de toda la población que no tiene recursos para pagarse salud privada”, y adelantaron que desde esa asociación “lo van a resistir”.
