La inflación volvió a subir en noviembre y alcanzó el 2,5%, según el dato oficial del INDEC, que confirmó una nueva aceleración respecto de octubre y septiembre. Los relevamientos privados ya anticipaban incrementos en rubros sensibles y advertían que la calma cambiaria ayudó a contener la inflación núcleo.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó 2,5% en comparación con octubre y acumuló un alza de 27,9% en los once meses de 2025. En la medición interanual, el indicador avanzó 31,4%, en un contexto en el que consultoras y economistas venían marcando presiones sobre distintos segmentos del consumo.
La división con mayor incremento mensual en noviembre fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, que subió 3,4%. En contraste, Prendas de vestir y calzado registró la menor variación, con apenas 0,5%. Además, Alimentos y bebidas no alcohólicas volvió a ser el rubro que más incidió en la suba general en todas las regiones del país.
El avance del 2,5% se suma al 2,3% de octubre y al 2,1% de septiembre, consolidando una tendencia alcista en el cierre del año. Para los analistas, la dinámica de precios muestra un escenario mixto: cierta desaceleración en la núcleo por la estabilidad del dólar, pero con aumentos persistentes en bienes y servicios esenciales.
Antes de que el Indec difundiera el dato oficial, las estimaciones de consultoras y economistas ya anticipaban que la inflación de noviembre superaría el 2%. La referencia más cercana era la medición porteña, que mostró una ligera alza frente al 2,3% registrado en octubre.
