Haz lo que yo digo… Castagneto, un evasor serial al mando de la AFIP
Carlos Daniel Castagneto volvió a quedar en el centro del torbellino cuando la AFIP, el organismo que conduce desde hace unos meses, expuso a la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, al sacar a la luz los presuntos chanchullos del peronismo con los planes sociales.
Después de colgar los botines, Castagneto se convirtió en un político de raza que supo acomodarse claramente en el Estado. El exarquero de fútbol fue viceministro de Desarrollo Social, diputado nacional electo por el kirchnerismo en el 2015, reelecto en 2019. Sin embargo, a la brevedad renunció porque el gobierno de Alberto Fernández lo designó para ocupar un cargo en la AFIP, precisamente como titular de la Dirección General de los Recursos de la Seguridad Social. Los cambios en la política lo llevaron a ser, meses después, el número 1 del organismo recaudador.
Por su labor actual, el dirigente platense percibe más de $2 millones mensuales, prácticamente el doble de lo que se lleva de bolsillo el presidente de la nación, Alberto Fernández. Una cifra más que interesante para hacerle frente a la inflación agobiante que padecemos los argentinos.
El hombre identificado con Gimnasia y Esgrima La Plata registra a su nombre un BMW 320 2006 y es propietario de seis viviendas y una Ford Ranger 2013 con deudas a ARBA superiores a los $50.000.
Lejos de dar el ejemplo como buen contribuyente, el funcionario también fue dado de baja del monotributo en 2018 por no cumplir con los mínimos requisitos. Para colmo, Castagneto arrastra en su contra un juicio ejecutivo en el Juzgado Federal N° 11 de CABA, pero el presunto blindaje político tiene sus beneficios.
El creador de “Unidad Ciudadana”, Castagneto facturó cada vez que se utilizó a esa marca, integra la sociedad Esvica SA junto a su esposa Ana María Herrán. Sin embargo, pese a ser el titular de la AFIP, nunca presentó un balance sumado a la evasión impuestos, en situación prejudicial. Flojos de papeles los Castagneto.
Por otro lado, Carlos Castagneto integra la societaria de un centro médico llamada “Dra. Verónica Páez”. Sorpresivamente, la empresa vinculada a la salud no está bancarizada. ¿Será el lobo disfrazado de cordero?
La familia Castagneto también vive a expensas del Estado. Su hijo Gastón Castagneto, como buen heredero de la tradición familiar, se desempeñó hasta fines 2019 como concejal en la capital bonaerense por el FPV/Unidad Ciudadana, al igual que su señora. Actualmente Ana Herrán fue reacomodada en el Ministerio de la Provincia de Buenos Aires en un cargo a cambio de $400 mil mensuales. También suele circular en un lujoso BMW 320 D, modelo 2009 que, para no ser la excepción, adeuda patentes.
En su última declaración jurada presentada, en la que omite varios ítems, Carlos Castagneto reconoció ser poseedor de 40 mil dólares (a precio blue, unos $13 millones), un ahorro de 160 mil pesos, otra cuenta por $1,5 millones, un plazo fijo de $17 millones. Entre chauchas y palitos suman $35 millones para resguardarse de años de malaria. Como frutilla de postre, el exfutbolista también tiene un plazo fijo en dólares por u$d 770 mil. Haz lo que yo digo, pero no lo que hago… ¿o sí?
