Pese al mal servicio y los apagones, el Gobierno confirmó el aumento de tarifas eléctricas en el AMBA
En medio de la crisis energética, marcada por los apagones masivos durante la ola de calor, el Gobierno oficializó los nuevos cuadros tarifarios para la luz, con aumentos sustanciales para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Esta medida, que se enmarca dentro de la política de reducción de subsidios, afectará principalmente a los usuarios de clase media y de bajos ingresos.
La decisión fue formalizada en la madrugada del 6 de marzo en el Boletín Oficial, a través de las resoluciones 160/2025 y 162/2025 emitidas por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE). En términos de tarifas, los usuarios de Edenor verán un incremento en su factura, con los hogares de altos ingresos pagando un precio base de $1.037.840, más un cargo variable de $99.730. Los hogares de bajos ingresos, por su parte, deberán abonar un cargo variable de $39.839 por cada kWh consumido, mientras que los usuarios de ingresos medios afrontarán un cargo variable de $53.231. En Edesur, los usuarios de altos ingresos tendrán una tarifa mínima de $1.027.560, con un cargo variable de $99.755. Los hogares de ingresos medios y bajos verán cargos variables de $53.344 y $39.978, respectivamente.
Además, se estableció que las facturas de electricidad deberán incluir un apartado donde se detallará si se aplicó algún subsidio. A partir de ahora, este subsidio se calculará en función del consumo mensual y los valores fijados a principios de año. Sin embargo, no se descartan nuevos aumentos, ya que las empresas proveedoras de energía justifican estos incrementos con el argumento de que el costo de la energía en Argentina sigue siendo bajo en comparación con otros países de la región.
La situación actual del servicio eléctrico
A pesar de los constantes aumentos en las tarifas y la desregulación del sector energético, el servicio eléctrico sigue mostrando deficiencias, especialmente en el AMBA. En las últimas 48 horas, un corte de energía de gran magnitud afectó a cientos de miles de usuarios en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, dejando sin luz a más de 600.000 personas durante varias horas, y generando graves inconvenientes en el transporte público y el tránsito.
El apagón, que se produjo a las 5:25 horas del 5 de marzo, afectó barrios como Almagro, Balvanera, Parque Patricios, Villa Crespo, La Boca y San Cristóbal en la Capital, así como localidades del sur del Conurbano, incluyendo Avellaneda, Lanús y Quilmes. La falta de electricidad generó problemas con los semáforos en puntos clave, lo que resultó en caos vehicular. Además, las líneas A y B del subte fueron las más afectadas, con la B interrumpida completamente y la A operando solo entre las estaciones Río de Janeiro y San Pedro.
La empresa EDESUR informó que el apagón se debió a una falla en dos líneas de alta tensión, que afectó a varias subestaciones y derivó en la desconexión de las centrales Dock Sud y Ensenada de Barragán. Si bien la empresa logró restablecer el suministro a más del 60% de los afectados, persistieron zonas sin electricidad durante varias horas. A pesar de este restablecimiento parcial, el Ente Regulador de Electricidad (ENRE) no emitió un comunicado oficial sobre el tiempo estimado para la normalización completa del servicio, lo que generó malestar entre los usuarios.