En el marco de una causa por inconstitucionalidad del protocolo antipiquetes de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y con el fin de evitar nuevos abusos por parte de las fuerzas, el juez federal, Martín Cormick, supervisará de manera presencial la marcha de jubilados de este miércoles 19 de marzo.
Ante la brutal represión del miércoles pasado, el gobierno nacional, a cargo de Javier Milei, afrontará el próximo 19 de marzo una nueva marcha de jubilados, que se prevé que será multitudinaria, ya que tendrá el acompañamiento, hasta el momento, de ambas CTA (Central de Trabajadores de la Argentina), la Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (UTEP).
Además, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y organizaciones estudiantiles informaron que también se sumarán a la marcha de jubilados del próximo miércoles bajo la consigna “A las calles con la celeste y blanca”, en una sugerencia para que quienes concurran lo hagan con camisetas de la selección argentina. En la misma sintonía que la concentración pasada cuando concurrieron hinchas de fútbol.
Ante la convocatoria, la cartera que conduce Bullrich prepara un gran operativo policial en coordinación con el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, con el objetivo de evitar los desbordes del miércoles pasado. De esta manera, a los mil efectivos desplegados en las calles se sumarán más uniformados de apresto. En paralelo, se realizarán controles en rutas nacionales y en los ingresos de la Capital Federal.
En ese contexto, ante posibles desmanes, el Juez Federal en lo Contencioso Administrativo, Martín Cormick, dispuso que su juzgado monitoree “presencialmente” lo que ocurra en la marcha de los jubilados de este miércoles frente al Congreso, luego de los incidentes protagonizados por manifestantes y fuerzas de seguridad la semana pasada.