Luz y gas: el dato sobre la inflación que incomoda al Gobierno
Las tarifas energéticas promediaron el IPC hacia arriba, con una suba mucho mayor a la autorizada por la Secretaría de Energía.
El gobierno de Javier Milei festejó, el último jueves, la baja de la inflación por tercer mes consecutivo contra los pronósticos del mercado. Pero hay un punto que incomoda al equipo económico: la luz, el gas y los combustibles subieron varias décimas más que los aumentos autorizados en el último mes. Un dato que explica que Economía haya tenido que posponer la quita de subsidios hasta mediados de 2025.
El IPC del Indec de noviembre, que se conoció el miércoles, mostró una inflación de 2,4% para ese mes. Se trata, sin dudas, de un logro en sí mismo para el Gobierno, que puede exhibir una desaceleración de los precios ininterrumpida desde el 4,2% de agosto, pasando por el 3,5% de septiembre y el 2,7% de octubre. Especialmente cuando las consultoras privadas esperaban un estancamiento o incluso un leve repunte.
Aun así, en el desagregado hay una categoría básica que elevó el promedio. Se trata de «Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles», que aumentó un 4,5% a nivel nacional, casi el doble que la general.